Sufrimos más de la cuenta por lo que no tiene solución. Vivimos deseando la estabilidad y la permanencia, pero no nos damos cuenta de que nada es fijo, lo construido se derrumba, lo querido se “desquiere”, lo poseído se pierde…
Sufrimos más de la cuenta por lo que no tiene solución. Vivimos deseando la estabilidad y la permanencia, pero no nos damos cuenta de que nada es fijo, lo construido se derrumba, lo querido se “desquiere”, lo poseído se pierde…