Al final te das cuenta que lo pequeño siempre es más importante. Las conversaciones a las tres de la mañana, las sonrisas espontáneas, las fotos desastrosas que te hacen reír a carcajadas, los poemas de diez palabras que te sacan una lágrima. Los libros que nadie más conoce y se vuelven tus favoritos, una flor que te pones en el cabello, un café que te tomas solo… Eso es lo que verdaderamente vale la pena; las cosas diminutas que causan emociones gigantescas.
Citas
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La lluvia cae porque las nubes no aguantan el peso, las lágrimas caen porque el corazón no aguanta el dolor.
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Volver a empezar, aún no termina el juego. Volver a empezar, que no se apague el fuego. Queda mucho por andar. Y que mañana será un día nuevo bajo el Sol. Volver a empezar
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Ríete, ríete hasta que te lo creas, porque nada es tan importante
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Las raíces bajo la tierra no piden recompensa por hacer que las ramas den frutos.
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El abrazo es algo grandioso. Es la manera perfecta para demostrar el amor que sentimos cuando no conseguimos la palabra justa.
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Perdonar no es un acto de debilidad. No es inclinarse hacia quien nos ha hecho daño. Solo las personas más valientes y humildes ejercen el perdón en su forma más sabia: para liberarse del sufrimiento y avanzar con mayor fortaleza.
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El distractor más poderoso no es la charla interpersonal, sino la incesante cháchara intrapersonal que se da en el escenario de nuestra mente. La verdadera concentración exige acallar esa voz interior. Una resta en la que, partiendo de 100, vamos sustrayendo sucesivamente 7 acabará aquietando, si nos concentramos en esa tarea, ese diálogo interno.
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Y ahora, ahora, en este momento de mi vida, no quiero casi nada. Tan sólo la ternura de mi amor y la gloriosa compañía de mis amigos. Unas cuantas carcajadas y unas palabras de cariño antes de irme a la cama. El recuerdo dulce de mis muertos. Un par de árboles al otro lado de los cristales y un pedazo de cielo al que se asomen la luz y la noche. El mejor verso del mundo y la más hermosa de las músicas. Por lo demás, podría comer patatas cocidas y dormir en el suelo mientras mi conciencia esté tranquila.